LA MARCHA DE LOS CUATRO SUYOS
Una gesta cívica y democrática que marcó el punto de quiebre de la dictadura.
En la mañana del 28 de julio del 2000, cerca de 5 mil manifestantes se dirigieron hacia el Palacio de Gobierno y al Congreso. Cruzaron las avenidas Lampa y Emancipación en donde se produjo el primer choque con el cordón policial. Las voces de los participantes de esta protesta se unieron como nunca antes se vio en la historia del Perú.
“La Marcha de los Cuatro Suyos” fue un acontecimiento cívico y democrático, una lucha colectiva que unió partidos políticos, organizaciones sociales, gremiales y populares, también a ciudadanos independientes, jóvenes universitarios y trabajadores formales e informales. Estuvo encabezada por líderes del partido político peruano Perú Posible, Alejandro Toledo y Carlos Ferrero Costa quienes se movilizaron con una sola convicción: defender el sistema democrático y acabar con la dictadura de los años 90.
Mientras Alberto Fujimori juramentaba por tercera vez como presidente del Perú, miles de manifestantes estaban a unas cuadras del Palacio Legislativo luchando por sus vidas y escapando de los gases lacrimógenos. La gresca comenzó y la ciudad se oscureció bajo el humo negro que propinaban los ataques policiales, algunos edificios se incendiaban y decenas de protestantes caían heridos a los suelos. Lima se convirtió en un escenario atroz y violento.
La Marcha comenzó como una manifestación pacífica pero culminó convirtiéndose en un festín de desmanes. El incendio de los locales del Jurado Nacional de Elecciones (JNE) y de la sede central del Banco de la Nación fueron claros ejemplos de violencia donde murieron 6 vigilantes consumidos por el fuego.
Una población con anhelos de libertad y cansados de injusticias encontraron en la marcha la posibilidad de unirse en un mismo ideal y así erradicar la dictadura en nuestro país.
Diez años después se dio a conocer al verdadero causante de la barbarie, fue el Servicio de Inteligencia Nacional (SIN), controlado por Vladimiro Montesino y Alberto Fujimori quienes ordenaron a las fuerzas policiales un despliegue estratégico cerca de los edificios públicos e impedir violentamente el ingreso de aquellos que lucharon en contra de la corrupción.
